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La saliva como muestra biológica en el sector porcino tiene muchas ventajas si se compara con la extracción de sangre:

- Procedimiento no invasivo y normalmente sencillo.

- La toma de la muestra no produce dolor.

- Se pueden obtener muestras repetidas en cualquier momento, en cualquier lugar y sin necesidad de personal especializado.

 

En las granjas, el personal puede tomar las muestras fácilmente, lo que permite:

- Realizar análisis más frecuentes.

- Mejor control de la salud y el bienestar.

- Llevar a cabo intervenciones más rápidas y más enfocadas.

El muestreo y manejo de saliva

A continuación, compartimos una serie de recomendaciones generales para el muestreo y manejo de saliva en cerdos hechas por los autores:

1- Uso de esponjas: permite obtener saliva estimulada con menor contenido de mucina, lo que facilita el procesamiento y manejo de las muestras.

2- Si las muestras no se procesan en poco tiempo, se recomienda refrigerarlas o al menos mantenerlas en un lugar fresco, hasta su llegada al laboratorio.

3- Las muestras deben centrifugarse para eliminar los restos de células y alimentos.

El uso de la saliva como biomarcador

Según los autores, en la saliva porcina se pueden detectar más de 23 patógenos virales; además, la detección de enfermedades infecciosas es posiblemente el principal uso de la saliva en el sector porcino.

 

Sin embargo, la saliva también se puede utilizar para evaluar otros aspectos relacionados con la salud y el bienestar de los cerdos que pueden ser de interés, como la evaluación del estrés, la inflamación, la respuesta inmune y la homeostasis redox.

 

 

Y en estos otros aspectos, es en los que se centra este estudio* realizado por un equipo de investigadores de la Universidad de Murcia.

 

 

Para ello, seleccionaron los siguientes biomarcadores:

 

- Cortisol: evalúa el eje hipotálamo-pituitario-suprarrenal (HPA).

- Alfa-amilasa salival (sAA) y cromogranina A (CgA): relacionadas con el sistema nervioso autónomo (SNA).

- Esterasa total (TEA) y algunos de sus componentes como la lipasa salival (sLip) y la butirilcolinesterasa (BChE): enzimas que se han relacionado con situaciones de dolor e incomodidad.

- Oxitocina (OT): interés creciente como marcador de emociones positivas.

La evaluación del estrés

El cortisol es posiblemente el biomarcador más utilizado para detectar estrés en cerdos. Cuando ocurre una condición estresante, hay una activación del eje HPA, se produce cortisol y este se libera en la sangre.

Cabe destacar que, en la sangre el cortisol está presente en dos fracciones (cortisol unido a proteínas y cortisol libre) mientras que en la saliva solo existe el cortisol libre, que es la fracción activa.

 

Por su parte, la sAA puede ser cuantificada directamente por inmunoensayos, o puede ser evaluada por su actividad enzimática por ensayos espectrofotométricos, siendo este último más sensible para detectar condiciones estresantes en cerdos y humanos.

 

La CgA se puede medir mediante inmunoensayos en la saliva de los cerdos. Todos ellos son ensayos más fáciles de realizar y más económicos que los análisis de adrenalina y noradrenalina.

 

La OT es una hormona que, además de su papel fisiológico en el parto y la lactancia, se considera un biomarcador de emociones positivas y bienestar social en animales domésticos.

 

El aumento de TO con situaciones de bienestar positivo contrasta con el resto de biomarcadores de estrés utilizados hasta ahora, que aumentan cuando hay una situación estresante o de bienestar negativo.

En la saliva de los cerdos, como en otras especies, la OT puede presentarse en dos formas principales: ligada a proteínas o libre. Por lo general, para medir la OT en la saliva se utilizan inmunoensayos.

¿Qué sucede con la inflamación?

Las APP son proteínas que cambian de concentración en respuesta a la inflamación, siendo consideradas los biomarcadores más sensibles y precoces de este proceso.

 

La particularidad más importante con respecto a las mediciones de APP en la saliva es el hecho de que las concentraciones de las APP más importantes, como la proteína C reactiva (PCR) o la haptoglobina (Hp), se encuentran en concentraciones aproximadamente 1.000 veces más bajas en la saliva que en el suero.

 

 

Esta sería la razón por la que algunos intentos de medir APPs en la saliva con ensayos convencionales pueden no tener éxito. Por lo tanto, se recomienda el uso de ensayos más sensibles para detectar APP en la saliva. Por ejemplo, los ensayos fluorométricos o Alphalisa de resolución temporal.

 

El sistema inmunitario

ADA es una enzima expresada de forma ubicua que aparece en la saliva.

 

Por otro lado, en la saliva hay:

 

- IgG e IgM: se derivan principalmente de la sangre.

- IgA: es producida principalmente por las glándulas salivales en las células plasmáticas.

La concentración de IgA parece estar más influenciada por el estrés, mientras que las IgG e IgM en saliva estarían más relacionadas con su concentración en suero. Los tres tipos diferentes de Ig pueden medirse en la saliva de los cerdos mediante inmunoensayos con un rendimiento analítico adecuado.

Conclusiones

La saliva de los cerdos se puede utilizar para medir biomarcadores que pueden ayudar a evaluar el estrés, la inflamación, el sistema inmunitario y la homeostasis redox. Sin embargo, según confirman los propios autores, todavía se necesitan más datos para validar el uso de la saliva en este campo.

 

 

 

*Cerón, J.J., Contreras-Aguilar, M.D., Escribano, D. et al. Basics for the potential use of saliva to evaluate stress, inflammation, immune system, and redox homeostasis in pigs.BMC Vet Res 18, 81 (2022). https://doi.org/10.1186/s12917-022-03176-w.